martes, 10 de noviembre de 2020

ENEATIPO 5

 

ELISABETH HARMON


Tímida, callada, no muestra a penas emociones, sólo soberbia y regodeo algunas veces. Muestra el típico porte del Cinco, con los brazos colgando, la mirada fija y el andar tipo “robot”.

Se aburre enormemente en el orfanato, así que, una vez que ha descubierto el ajedrez, aprende y se dedica a jugar en su mente, en ese espacio de libertad y realización donde los Cincos se sienten tranquilos.

No le interesa nada más, ni nadie más, no expresa ningún interés por lo que sucede a su alrededor, ni siquiera por la muñeca que le regalan, y no se relaciona prácticamente con nadie. Solamente se siente atraída por su compañera, un Eneatipo 8, algo habitual también en el comportamiento de los Cincos, puesto que los Ocho poseen esa energía poderosa que tanto necesitan los Cincos.

El asunto clave son las pastillas, las que le dan alas para navegar por su mente como si fuera un mundo aparte. Aquí encontramos un tópico de este eneatipo, muchos son los que, en solitario, acuden a las drogas o el alcohol para evadirse del insoportable vacío existencial, para apartarse del absurdo y estúpido mundo en el que vivimos, y del que no se sienten parte…

Observadora, analiza y planea cómo va a conseguir entrar en el mundo de los “masculinos” Clubs de Ajedrez. No le interesa la vida social, ni siquiera en el instituto, y no aprende a relacionares con sus compañeras, tan diferentes y tan “normales”

Su obsesión es el ajedrez, y comprar libros, como si fueran manzanas, para seguir aprendiendo, para seguir investigando…

Tiene la suerte, de no muchos Cincos, de tener una madre adoptiva muy comprensiva, que no le exige apenas nada, ni siquiera comportamientos emocionales o convencionales, y que la apoya y la anima a seguir adelante con su propósito.

Para Elisabeth el ajedrez puede ser algo hermoso: Me siento bien sola. El tablero es un mundo, en solo 64 casillas, me siento segura en él, puedo controlarlo, puedo dominarlo, y es predecible…

sábado, 3 de octubre de 2020

ENEATIPO 8

 

Brillante interpretación de Mario Casas sobre una relación posesiva. El Eneatipo Ocho, en su expresión más neurótica, tiene una marcada tendencia a dominar, a obligar a su pareja a hacer lo que se le diga, como si fuera una propiedad y no tuviera voluntad propia.

Ya desde el principio de la película podemos ver un comportamiento lujurioso, un deseo sexual desmedido, que tiene que ser satisfecho cuando él lo desee.

Al mismo tiempo vemos la falta de sensibilidad, de ni si quiera tener en cuenta cómo se siente su pareja o si está disfrutando o no. En la lujuria encontramos un componente de “tener derecho”, es mi mujer, es mía y debe darme placer…

Más adelante observamos otras características de este eneatipo, en su peor versión, en la falta de empatía y en lo que se pude calificar de psicopatía.

Pero me quedo aquí para no hacer ningún “spoiler”. Es, en cualquier caso una brillante interpretación de un, cada vez más, buen actor, que merece la pena ver. No solo por la película, sino por aprender eneagrama…

Eneatipo 1 THE EQUALIZER


ROBERT McCALL (THE EQUALIZER)

Agente de la DEA retirado, Robert McCall, una persona escrupulosa con el orden y la limpieza, es habitual el calzado limpio, la ropa ajustada correctamente, el cabello ordenado; en el trabajo suelen ser también muy perfeccionistas, tratando de no perder la atención en el detalle y en la correcta ejecución de las tareas.

Muestra ese impulso inevitable que tiene el Uno por mejorarlo todo, no solo a ellos mismos sino a los demás también, sobre todo cuando la otra persona le importa y además ésta actúa con indulgencia o irresponsabilidad.

Pose rígida, educado y correcto en todo momento, aunque no deja de dar consejos y tratar de mejorar a los demás, por ejemplo a la chica a la que él cree que necesita de su ayuda, por que evidentemente le van mal las cosas porque está equivocada.

El eneatipo Uno muestra un firme control emocional, al mismo tiempo podemos ver o intuir que siente una “ira” constante en su interior ante todo lo que no es como debería ser, así que elabora un mecanismo de represión que mantiene a raya su agresividad, pues no sería correcto mostrarla, de ahí esos comportamientos tan estrictos que realiza a menudo, como disponer la mesa milimétricamente correcta, o abrir y cerrar la puerta varias veces para serenarse. 


Una de las cosas que no puede soportar un Uno es la injusticia, los abusos, el maltrato, etc., y aunque no desea perder la compostura no puede evitar la tentación de actuar, primero aconsejando como todos los Unos, después actuando y arreglando las cosas…


viernes, 24 de abril de 2020

Eneatipo 1 auto-conservación, IL PROCESSO




 Elena Guerra 

Eneatipo 1, disciplinado y autocrítico. La "ira" como emoción contenida, resultado de la frustración de no ser perfecto, de sentirse defectuoso, y sobretodo de no ser capaz de aceptar la realidad. El "perfeccionista" vive comparando el mundo en el que vive con un ideal de cómo deben ser las cosas, empezando por él mismo, y esto le provoca una actitud de resentimiento, de verse impulsado a juzgar y sentenciar lo que considera como equivocado.
Esto se traduce habitualmente en un talante de superioridad moral y auto-exigencia que no les permite relajarse, ni con los demás ni consigo mismos, y que les lleva a tratar de mejorar las cosas, a cambiar el mundo, para así sentirse mejor. 



El 1 auto-conservación es un Uno más suave, más emocional, y es el que menos muestra la "ira" de los tres. Son los más perfeccionistas, en el sentido de hacer un gran esfuerzo por ser mejores personas, en hacer las cosas de la manera correcta. Es habitual encontrar personas con este eneatipo en los juzgados, donde pueden desarrollar su pasión en nombre de la ley y hacer gala de su gran capacidad de discernimiento y de comprensión del bien y del mal.



Elena Guerra es una magistrada que ejerce como fiscal en un caso que le pone en una de las más difíciles situaciones para el Uno auto-conservación, el tormento y la culpa por haber hecho algo mal, algo inmoral, así que necesita redimirse, tiene que  encontrar al culpable y sentenciarlo, cumplir con su deber pues en su interior se siente responsable de lo sucedido, responsable de un error que no le va a permitir vivir en paz.




Este subtipo tiene un gran sentido de la responsabilidad, un fuerte impulso por cumplir con sus obligaciones y de hacerlo de manera impecable. Son personas que necesitan tenerlo todo controlado, prever y preocuparse por cualquier fallo que puedan cometer y así sentir que están en el camino correcto. Pero ella se encuentra entre el dilema de abandonar el caso, puesto que sería lo correcto, o conseguir sentenciar a la culpable del crimen. Esta angustia le provoca un gran sufrimiento, no solo es su propósito ganar el juicio sino que lo necesita, como si el hecho de que castigue a la culpable le resarciera de su error.



Es fácil ver en su rostro el reflejo de la ansiedad que sufre ante las dificultades que se va encontrando durante el juicio, el Uno observa el mundo en una actitud de "blanco o negro", no soporta vivir con el error, si te equivocas eres malo, no mereces ser feliz, tienes que arreglarlo, ocuparte, esforzarte, solo cuando lo hagas todo de la manera correcta podrás vivir en paz. Ella no puede vivir en paz, sabe que se ha equivocado, y tiene que arreglarlo, pero lo ha de hacer sin trampas, aunque a veces se perjudique a sí misma...



En sus aspectos más sanos el eneatipo 1 utiliza su ira, su impulso reformador, para ponerse al servicio de la sociedad. Honestos y honorables, conscientes de su lugar en el mundo y de la manera de contribuir en la defensa y la construcción una vida mejor para todos, a partir de los más elevados valores humanos de los que ellos son estandartes. 












jueves, 16 de abril de 2020

Eneatipo 4 auto-conservación, LUTHER


John Luther

Un tipo duro y resistente, capaz de soportar lo que haga falta. Una mirada de alma atormentada que se bate entre el dolor y la culpa, y una expresión de rabia contenida consecuencia de esa "envidia" característica de este eneatipo.




El subtipo auto-conservación es el 4 "contrapasional", el Cuatro que menos muestra la envidia, la lleva por dentro como si no quisiera quejarse, como si aguantar sea lo que le convierte en bueno, es el Cuatro más sufrido, el más introvertido, una persona que va por la vida tragando todo el sufrimiento que se encuentra por el camino. John Luther es un buen policía, el mejor, y "los buenos polis cargan con la culpa de todo lo malo".





Este subtipo se suele confundir con mucha frecuencia con un Uno, son personas muy eficaces, trabajadoras y cumplidoras. Sin embargo Luther no es un Uno, es un "individualista" que quiere hacer las cosas a su manera, que puede con todo, que se aparta en las reuniones para pensar en el caso por su cuenta, o que toma el mando y cambia las reglas, porque las reglas están bien pero solo cuando funcionan. 




Tiene una manera diferente de hacer las cosas, es, como buen Cuatro, más creativo, empático, capaz de comprender la condición humana hasta del alma más perturbada, muy hábil a la hora de meterse en la cabeza del asesino, de descubrir las razones que le han llevado a cometer el crimen y de saber cómo se siente, para anticipar el próximo paso y apresarlo. 




No sigue los protocolos establecidos, hace lo que hay que hacer: "hago lo correcto, cuando las circunstancias son especiales se han de cambiar las reglas", lo que importa son las personas, y que éstas no sufran.

Rebelde e impulsivo, desprecia el sistema y a las personas que lo representan, otra manifestación indirecta de su envidia. Él cumple, es disciplinado, pero primero son las personas, las víctimas. Le importa la gente, es afectuoso, cariñoso, fiel, incluso tierno, "es mi compañero y lo quiero". 




Luther sufre en silencio, sin quejarse, sin lamentarse. Incapaz de vivir en el presente revive el recuerdo de todas las desgracias que le han pasado, de las veces que se ha sentido culpable, como si no quisiera o no pudiera olvidar. Es como si prefiriese sentirse una víctima de las vida antes que hacer algo para mejorarla, su sufrimiento es su identidad, cada caso es su responsabilidad, cada víctima su carga, cada fallo su culpa...





Melancólico, cae en la desesperación después de que su esposa le abandone por otro. Es incapaz de aceptar que ella no quiera compartir su sufrimiento, que quiere vivir y disfrutar, lo cual solo hace que añadir más sufrimiento y confirmar la idea de no ser merecedor de amor, y ya que el amor es lo único que puede salvar a un Cuatro pierde la esperanza y las ganas de vivir.




Intrépido y temerario, siente un desprecio total por su propia existencia, y una tendencia al suicidio que le lleva incluso a jugar a la ruleta rusa, o a arriesgar su vida en varias ocasiones, como si nada le importara, como si quisiera poner fin a su sufrimiento, o quizás lo que pretende es sufrir más, saber cuánto dolor es capaz de soportar...




Por otro lado, como un buen Cuatro, empático y comprensivo, se compadece de las personas desfavorecidas, trata de ayudarlas, y además tiene esa extraña tendencia masoquista a aliarse con algunos de sus enemigos, como si olvidara por completo que le han querido hacer daño...




Un tipo rudo, capaz de caminar con una bala en la pierna como si ni se acordara de que le han disparado; capaz de ser golpeado, soportar el spray de defensa en los ojos, de recibir descargas eléctricas y aún así resistir y defenderse. Y por otra parte es incapaz de abandonar a su suerte a la chica de turno, aunque tenga que pagar un precio muy alto por ello...





En cualquier caso es un buen "poli", el mejor, se deja la piel en ello, haciendo honor a la pasión satélite de este subtipo "tenacidad", luchando hasta las últimas consecuencias y resistiendo hasta el límite. Y si no puede salvar a alguien se atormenta y se fustiga, se mortifica como si lo hubiera matado él mismo, claro que desde su punto de vista: "esas personas estarían vivas si yo hubiera estado allí"...


















miércoles, 8 de abril de 2020

Eneatipo 9 auto-conservación, RAGNAROK


Magne Seier

Grande, fuerte, parsimonioso, con cara de buen chico y mirada de resignación. Magne pronto demuestra qué clase de persona es, amable, bondadoso y generoso, alguien que no se lo tiene que pensar a la hora de ayudar a los demás.


Además es un hijo que se esfuerza por no dar problemas, que cuida de su madre, que no le lleva la contraria y que apenas se queja, y que prefiere callar y dejar hacer, soporta con abnegación las bromas de su hermano, y cuando en el instituto se ríen de él se mantiene callado, eso sí, con una mueca de rabia contenida y una mirada de desprecio. No le preocupa tanto lo que le digan los demás como la posibilidad de que esa ira que siente en su vientre se pueda descontrolar y explotar, así que desconecta, ni siquiera se altera, al menos por fuera. 


Este eneatipo suele parecer muy tranquilo, imperturbable, sin embargo por dentro puede sentirse nervioso, inseguro, desconfiado y alerta. También se siente con frecuencia insignificante, prescindible, y que no tiene derecho a expresar su enfado. que no debe molestar ni crear problemas, y si algo despierta su ira se la traga y sigue como si se le olvidara lo que ha pasado...



Esta tranquilidad aparente no significa que sea insensible ni que no le importen las cosas, más bien al contrario, le importan y mucho, sobretodo las injusticias y la opresión. Este es el motivo por el que Magne, aunque no quiera crear problemas, se comporta como un testarudo y reclama sin hacer mucho ruido una solución, es su manera de posicionarse con firmeza, sin retroceder, pero sin ser agresivo, más bien se trata de agresividad pasiva, provoca un poco, se calla y encaja la reacción del otro, esperando a la próxima ocasión, porque en el fondo sabe que no podrán con él, y menos ahora que ha descubierto quién es...


Una de las mayores carencias de este eneatipo es la asertividad, le cuesta expresar lo que piensa, o lo que desea, y cuando lo hace provoca el temido conflicto que tanto le bloquea, así que acaba callando y marchándose para poder calmarse. El 9 auto-conservación es un 9 que necesita bastante estar solo, al ser el que más siente la ira de los tres subtipos es el que más se perturba ante los demás, por lo que estar solo con sus cosas es una manera de estar tranquilo, y tranquilidad es lo que más necesita.


Integridad, honestidad y franqueza, una persona con pocas elucubraciones, su filosofía no es más que hacer el bien y vivir en paz. Amante de los animales, la naturaleza, los amigos y la familia. Y el amor, aunque éste sea un amor platónico, que vive cuidando y haciendo feliz a la amada, incluso cuando esta no le corresponde.



Humildad, es un gigante, un dios, pero se siente pequeño, no está cómodo siendo especial, al fin y al cabo ser especial es el principal motivo por el que no puede vivir en calma. El eneatipo 9 no tiene más ambición que una existencia tranquila, y poder disfrutar de los placeres que ofrece la vida, comer, beber, dormir, soñar y amar; pedir más es complicarse y exponerse al conflicto...


Vive pendiente de su madre, le importa mucho ser un buen hijo, incluso hay un momento en que renuncia a su propósito y acepta acudir a un hospital psiquiátrico para ser tratado de un trastorno mental, con tal de que su madre no sufra más, y sobretodo que no le haga sentir culpable, otro de los demonios de este eneatipo.
A pesar de todo, y de no haberlo pedido, es el destino el que le ha puesto ahí, es grande y es bueno, es un 9, pues es esta su esencia, y es el que ha llegado para salvar este mundo...









viernes, 3 de abril de 2020

Eneatipo 5, OZARK

Marty Byrde

Cómo mantener la calma en medio del caos...eso es lo que consigue Marty la mayor parte del tiempo, mientras los demás se desesperan, tienen miedo, se crispan, se violentan o se amenazan entre ellos, él no se inmuta. Todo lo gestiona con una gran capacidad de análisis. Racional y calculador, extremadamente hábil con los números y frío, muy frío. Incluso en los momentos más peligrosos consigue prescindir de sus emociones y pensar en la mejor manera de salir bien parado.



En sus propias palabras: no tenemos que dejarnos llevar por el pánico, hay que priorizar, compartimentar y organizar bien el tiempo; estamos en esta situación y llorar no nos va a servir de nada... 


Trabaja a todas horas buscando soluciones, sin dormir, delante del ordenador y metido en su cabeza, donde lo tiene todo organizado. El eneatipo 5 suele vivir en su propio mundo, donde puede controlarlo todo y sentirse seguro, así planea cada movimiento, como si fuera una partida de ajedrez, calculando todos las jugadas posibles de su adversario y teniendo preparada una respuesta para cada una de ellas.


En el fondo todo se trata de encontrar seguridad, no es su ambición expandir el negocio, eso representaría mayores dificultades para tenerlo todo controlado, sino vivir tranquilo y seguro con lo que tiene y con su familia. Puestos a controlar, es capaz de pagar a su terapeuta de pareja para manipular a su mujer a su favor, o instalar un programa en su portátil para espiar las llamadas de su mujer, lo importante es poder calcularlo todo bien para que no se descontrole demasiado la situación... 


Sin embargo todas las cosas no se pueden controlar, no es posible calcular todos los factores, en su cabeza está todo previsto, en el mundo real las reglas son diferentes, siempre suceden cosas que no nos esperamos. A pesar de todo, su profundo conocimiento y su destreza a la hora de hacer su trabajo es lo que le salva, lo sabe, su mente es un activo, y eso le salva...






miércoles, 1 de abril de 2020

Eneatipo 8 auto-conservación. "Cómo defender a un asesino"

ANNALISE  KEATING

Le encanta ganar, demostrar su poder, y sobretodo le encantan los retos, cuanto más difíciles mejor.  Mirada fija y desafiante que pretende dejar claro a quién tienes delante y a lo que te enfrentas. Voz contundente y segura, que no le tiembla ante nada, que se atreve con todo y que es capaz de aplastar a quien sea preciso para ganar un juicio.


De pocas palabras, las justas y necesarias, observa al otro y calcula sus debilidades. Todo el mundo puede ser un enemigo, piensa que es una estupidez fiarse de alguien, así que presiona, amenaza, exprime, y solo entonces le sirven las respuestas, las personas siempre ocultan algo y sólo lo puedes averiguar si las pones al límite. 

El eneatipo Ocho cree que la mayoría de personas son hipócritas por naturaleza, excepto ellos por supuesto, y que cuando la gente reacciona es cuando demuestra sus verdaderas intenciones, que cuando los provocas descubres lo que sienten en realidad. Por esto es que ellos acostumbran a ponerse delante tuyo y mirarte a los ojos fijamente mientras te agreden verbalmente, así saben de que estás hecho y, sobretodo, cuáles son tus debilidades. 



Le gusta ir por su cuenta y hacer las cosas a su manera, nada más insostenible para un Ocho que estar a las órdenes de alguien, así que demolerá lo que haga falta, y a quién haga falta, para conseguir resultados y callar a todos, yo mando porque yo puedo, y si quieres que ganemos lo haré a mi manera. 
El Ocho es el "jefe", o la "jefa", y si no puede ejercer su poder se suele dedicar a encontrar errores o limitaciones donde atacar o poner en evidencia a los que están por encima, hasta acabar dominando, o mejor aún, destruyéndoles y así poder tomar el control.




Cuando amenaza va en serio, si dice que lo va a hacer es que lo va a hacer, y se planta en la cara de quién haga falta con un: "es que piensas que no voy a hacerlo?" 


Este eneatipo disfruta profundamente con la provocación, con la oportunidad de demostrar que es un transgresor y que nada le va a parar, que puede hacer lo que quiera y que nadie le va a castigar.


Le gusta que se lo pongan difícil, que la provoquen, que la tienten a demostrar toda su furia. La mayor satisfacción que puede tener es aniquilar a su adversario, ahí se le dibuja una de las pocas sonrisas que se permite, la de alguien que se siente superior, poderosa, indestructible.











miércoles, 25 de marzo de 2020

ENEATIPO 7, Subtipo sexual



LUCIFER MORNINGSTAR


Ángel o demonio? Lo primero que sorprende es esa mezcla de malote con alma de niño, Lucifer insiste en verse a sí mismo como la reencarnación del mal, algo que le proporciona lo que más desea su enorme gula, hacer lo que le apetezca en cada momento sin tener que pensar en las consecuencias, y menos aún en las personas. Parece que siente un fuerte rechazo a ser bueno, a que le importe ser juzgado por sus actos, un miedo a que alguna voz interna, disfrazada de moralina, le impida disfrutar de la vida sin control y sin medida.
Sin embargo, por alguna misteriosa razón, consigue hacerse querer, consigue que le consientan sus caprichos y que le perdonen sus faltas, consigue parecer un niño que solo hace travesuras, que en el fondo no tiene mala intención, que solo quiere jugar y hacer amigos.



Seductor omnipotente, que utiliza a las personas como fuente de placer, se encuentra perdido y desconcertado en el mismo momento en que la inspectora de policía no cae rendida a sus encantos. Ella representa lo inaccesible, lo no puede ser manipulado a su antojo, algo que no solo le desconcierta sino que le atrae como una promesa de lo que nunca ha conseguido alcanzar, el amor. Pero nada da más miedo a este subtipo que las emociones auténticas, las que no se pueden fabricar sino que están en contacto con su mundo interior y nacen de él, aquel lugar del que nada quiere saber, donde se encuentra su verdadera alma, su infierno, como no...

Representa, Lucifer, de manera muy clara la principal característica del narcisista, la incapacidad de ver a nadie aparte de sí mismo. Toda la lógica de su mente está al servicio de una existencia epicúrea, todo razonamiento lleva al mismo sitio, "yo",  nada más que yo. Si no me proporciona placer no me interesa, si hacer algo por ti no me va a beneficiar no me interesa, por qué me iba a interesar? Un razonamiento que siempre observa su única ley, la vida se vive una vez  y no tiene sentido perder el tiempo en cosas que no te hacen feliz, ni en personas, por supuesto.
No es casualidad que sea propietario de un local de ocio nocturno, donde puede beber, drogarse y sobre todo tener sexo, todo el que quiera y de todas las maneras. Un local que utiliza además como un refugio, donde acude cada vez que la vida se pone seria, difícil o desagradable.






También nos ofrece este personaje esa actitud de mente brillante que todo lo sabe y que todo lo alcanza, que puede pasar de un salto de la torpeza y la falta de comprensión sobre cualquier asunto de sentido común, al ya lo sé todo y ya no me interesa que me digas más porque en un segundo mi mente ya ha llegado más lejos que la tuya, antes no sabía ahora ya sé más que tú. Así consigue proteger su pobre autoestima cada vez que tras acudir a alguien de su entorno en busca de consejo acaba haciendo lo que le da la gana, porque "me he dado cuenta yo", como no...





Más triste es cuando se encuentra en esos momento en que observa su interior, sus motivaciones y sus traumas. Cuando reconoce que no es más que un niño consentido, que no tiene justificación ninguno de los actos egoístas que le describen, que no es capaz de ser auténtico, que tiene que hacer el payaso para sentirse rodeado de personas, y que en el fondo se odia, se odia porque de tanto buscar el placer su vida no tiene un rumbo fijo, que tanto utilizar a las personas como si fueran cosas han provocado una soledad interior insoportable, que cuando se mira bien en su espejo narcisista acaba viendo un monstruo.



Lo más doloroso el es final de la serie. Después de todo acaba como empezó, siendo el rey de nada, en un mundo que no existe, y dolorosamente solo. Al fin y al cabo tiene que darse cuenta de que por mucho que persiga el placer lo que en realidad busca es el amor, pero tanta tierra quemada no permite que ese amor prometido pueda echar raíces, así que hay que retirarse a vivir en las nubes de  nuevo, en este caso en el infierno...